Nueva York/AP
El Comité para Proteger a Periodistas identificó a las Filipinas como el país más peligroso para ejercer el periodismo desde el 2000, seguido por Iraq, Colombia, Bangladesh y Rusia.
En Colombia, 11 periodistas han sido asesinados mientras cubrían temas como las drogas, organizaciones paramilitares y corrupción, indicó la organización.
EL CPJ (por su nombre en inglés) reveló también que la mayoría de los periodistas que murieron ejerciendo sus tareas en ese período no fallecieron en medio de enfrentamientos o en asignaciones peligrosas, sino que fueron atacados y asesinados como represalia por su trabajo.
Indicó que 121 de los 190 reporteros que murieron ejerciendo su profesión, fallecieron de esa manera.
En el 85% de esas matanzas, los atacantes no han sido condenados, dijo el CPJ en su informe, que se basó en cinco años de documentación archivada desde el 1 de enero del 2000.
El CPJ –una organización apolítica y sin fines de lucro dedicada a defender la libertad de prensa en todo el mundo– dijo que los cinco países más peligrosos tienen las peores estadísticas, y juntos representan casi la mitad de todas las muertes.
Los 58 asesinatos registrados en esas naciones fueron cometidos con impunidad. “Al no investigar y condenar a los asesinos, los gobiernos de estos cinco países alientan a todos aquellos que buscan silenciar a la prensa a través de la violencia