Marcha? Alguien dijo marcha? No. El planeta parecía demasiado ocupado con los colores amarillos y azules de la Copa Confederaciones en Alemania, con los verdes y vinotintos del Mundial sub 20 en Holanda, con los cardenales y verdolagas en la final del fútbol colombiano como para andar pensando en otras manifestaciones públicas.
Claro, sobraban las excusas como para olvidarse de la convocatoria mundial para marchar contra la pobreza. A quién se le ocurre marchar (y contra la pobreza) en medio de la neurosis de la cultura, como dice Yamid que dijo un autor inglés citando a Humberto Eco al hablar de fútbol (Sobre todo en finales, añado yo).
Por eso los gritos de goles y de derrotas opacaron las consignas que pretender presionar a los líderes del G-8 (los siete países más ricos del mundo, más Rusia) que seguramente llenaban los palcos de Hannover y